Situación complicada
Osasuna está en una situación mucho más complicada que la que se esperaba que estuviera a estas alturas tras golear al Espanyol. Entonces había dos partidos por delante ante el Levante y el Deportivo y lo que nadie pensaba era que de los seis puntos posibles los rojos únicamente fueran capaces de sumar uno. Pero esta es la triste realidad y por eso vemos a Osasuna a un punto del descenso.
Del optimismo tras el partido frente a los pericos y ver como hacía jugar Mendilibar a su equipo hemos pasado a una situación de intranquilidad. Hay confianza y esperanza en que el nuevo técnico logre dar en la tecla, sobre todo en la de fuera de casa, pero el problema está en que la debe dar con rapidez, empezando por el partido de este domingo en La Rosaleda. Otro fiasco ante los andaluces, una repetición de lo ocurrido en Valencia ante el Levante si que llevaría a casi todo el mundo al más profundo de los pesimismos.
Tras el encuentro contra los pericos hablábamos de los cinco importantes partidos que había por delante ante rivales directos y antes de la visita del Atlético de Madrid al Reino. De los cinco ya se ha fallado en los dos primeros y ahora nos quedan tres con las visitas a Málaga y Alicante y la del Racing al Reyno de Navarra. Los resultados que se den en estos partidos está claro que van a marcar de forma decisiva el futuro del equipo y sus posibilidades de permanencia.
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