Ajustando
Hubiera gustado que Osasuna ganara también su segundo partido de la gira italiana, porque los triunfos siempre son bonitos aunque sea en amistosos. Y más cuando juegas fuera del territorio foral. La victoria ante la Lazio había sentado muy bien. Pero ni uno ni otro resultado son para darle mayor importancia.
La pretemporada es para hacer ajustes en el equipo, para prepararlo de la mejor forma posible de cara a la temporada, para dar minutos a los jugadores y que cojan gasolina para el día 21 de agosto. Si los buenos resultados llegan mejor que mejor para ilusionar a la afición, pero nada más.
Mendilibar está buscando el mejor once y es evidente que no es ninguno de los que está poniendo sobre el campo. El técnico rojillo está mezclando jugadores en cada partido, en parejas en las que uno puede ser titular ante el Valencia y el otro suplente. Onces que no se hacen pensando en ganar los partidos amistosos, aunque si se ganan mejor que mejor.
De todos modos todo indica que hay potencial en ataque. La llegada de Nino e Ibrahima le ha dado otro aire a la punta rojilla compensando de sobra la marcha de Carlos Aranda. Y es bueno también ver que Lekic está marcando goles porque eso le puede dar al serbio la confianza que no tenía en la pasada campaña.
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